viernes, 15 de junio de 2012

Y SIGO IGUAL...

Este día  he tenido una de mis depresiones, pensé que, ya no tenía que diagnosticarme de la dichosa bipolaridad porque ya había superado mis etapas de crisis, mis depres, mis manías y todo eso, pero no... resulta que, he vuelto a tener depre.  Por la mañana, era el típico cansancio que ya conozco, el sueño constante, las insistentes ganas de llorar, de no ver a nadie, de no querer a nadie, ganas de encerrarme en mi recámara, de tumbarme en la cama y de colgarme el letrero de "déjenme en paz".  Más aún así me levanté, llegué a la oficina, me puse los audífonos, sin música claro está, solo para que nadie me hablara, el sol me heria, el aire me lastimaba, la gente me asfixiaba y yo ahí viendo la vida pasar sin quererla tocar. Ahora a esperar, se termina la depresión, sigue la calma o sigue la manía, no lo sé.  Le he sacado la vuelta al diagnositco porque me horroriza el tener una enfermedad que es crónica y con la que no podré lidiar, pero tampoco me gustaría padecerla sin tener que atenderla.  Total que ni como hacerle ni para donde hacerme.  Tan doloroso me resultó el vivir este día que terminé escribiendo esto, cuando pensé que esta etapa había pasado, que equivocada estoy...


Me miras, desde tu trono, 
Sentada, serena, impasible, 
Tus rasgos indefinidos, 
Tus ojos, líquidos, profundos, grandes, 
No se si eres vieja amiga o nueva conocida, 
Te acercas, a mi lado te tumbas, 
Te dejas caer en un leve suspiro, que se parece 
Más a un quejido, 
Te abrazo, junto a mi pecho 
Te quiero tener, 
Tu aliento me conmueve, me complace, 
No quisiera, pero como te deseo, 
Tus frías manos me recorren, y me estremecen, 
Voy cerrando mis ojos, esta dulzura se me antoja 
Tan marga, 
Esta tranquilidad se me forma tan angustiante, 
Entre torbellino de lágrimas a punto de derramarse, 
De sollozos que no pueden contenerse, 
De ahogadas palabras, de entre mis manos se escapa, 
Entre mis manos se va, como la suave arena del mar, 
Quiero besarte, no puedo evitarlo, 
Sé que ese beso será el principio del final, 
Pero quiero beberme el amor que no puedes darme, 
Quiero no quererte, pero te deseo, dentro de mí, 
Aunque eso me signifique morir… 
No te vayas, aún no te vayas, 
Quiero que seas tú, 
Quien por último observe mi mirada, 
Quiero colgar en ti mi último respiro, 
Ciérrame tú los ojos, 
Dentro de su sueño profundo, 
Se tú dulce sueño agónico, 
Quien tome mi mano, me lleve 
Y guíe al Estigia, 
Súbeme tu a la barcaza 
Y sé tu quien me despida, 
Se tú la navaja afilada, 
Que parta en dos mis venas, 
Se tú el liquido ambarino, 
Que cierre mi garganta, 
Se tú la soga que desate mi realidad, 
Se tú el abismo que se abre a mis pies, 
Se tú el viento que ondea mi vestido, 
Se tu el suelo con el que chocan mis sueños… 
No me dejes dulce muerte, no me sueltes dulce muerte, 
Muy a mi pesar, como te deseo, 
Muy a mi involuntaria necesidad, como te quiero…




Tendré que hacer cita con el psiquiatra...no me queda de otra que enfrentarlo cara a cara y de una vez saber que es lo que mi psique se trae entre manos... 

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